viernes, 14 de septiembre de 2007

OLVIDEN LO DE AYER

Eran minucias.

Una excusa para hablarles de mi hermano Andrés, a quien tanto defraudé.

Andrés, si algún dios te deja leer blogs, un abrazo. Sabrás que me he reformado. Escucho los blues de Saba que tanto te gustaban, vivo con una mujer como salida de tus consejos, le gusta la limpieza, come más de lo que bebe, sonríe a menudo... Tú me conociste a algunas que... Pero eran buenas chicas en general.

La última vez me guiabas por el aeropuerto como a un ciego. Debería hablar de cristales rotos, del último servicio, de que ya no tenías afecto que darme, pero es que no me acuerdo.

Supe que habías muerto unos días antes de mi última recaída. No tendré el mal gusto de decir que castigué mi hígado para decirte adiós.
Esta despedida te habrá gustado más.

3 comentarios:

RGAlmazán dijo...

¡Jode qué trite D. Vilos!
Tendría que contar algo más de Andrés, así podríamos solidarizarnos con él y confesarle si también a nosotros nos defrauda

Augusta II dijo...

Bueno, hombre, no hacía falta que se explicara usted por lo de ayer, la verdad es que no estaba muy alejado de lo que yo pienso, aunque con matices, ya sabe...

Qué triste lo de su hermano. No creo yo que le defraudara tanto. ¿Sabe una cosa?, yo tuve un sentimiento parecido cuando la Fernanda, mi querida hermana mayor, murió, pero luego eso se pasa...

En fin, un abrazo muy fuerte para usted, D. Vilos, y que Dios tenga en la gloria a su hermano.

Salu2!!!

Ten con Ten dijo...

Yo le iba a proponer cambiar el coche escoba por el perro escoba de Alicia.